Rinde para: 10 platos |
Comienza lavando la panza en agua caliente, ráspela hasta conseguir que quede blanca y limpia de cualquier impureza.
Luego enjuáguela en agua fría y póngala a hervir en una olla con tres litros de agua y sin sal. Cuando esté blanda, añada al caldo el corazón, el hígado y las otras vísceras enteras, previamente lavadas. Ahora añada las ramas de cebolla y las dos de perejil y la sal. Deje cocinar.
Aparte lave las tripas y voltéelas al revés y vuelva a lavarlas con abundante sal y jugo de limón. Luego enjuáguelas con agua fría y voltéelas al derecho nuevamente.
Ponga en un tazón el arroz, la cebolla, la col, el perejil y el culantro picados, el ajo, la sal, pimienta, orégano y un poco de achiote. También ralle dos plátanos verdes y agregue a nuestra preparación, luego corte en tajadas los otros cuatro plátanos y póngalos en el caldo.
Debe mezclar bien la preparación, verificar el nivel de sal, comprobar que el sabor de los aliños sea fuerte, y dividirla en dos porciones.
Morcillas negras:
Para preparar las morcillas negras agregue a una de las porciones el litro de sangre fresca pasándolo por un cedazo grueso. Mézclelo bien y rellene con esta preparación las tripas más gruesas. Luego ateles los extremos y amárrelas de trecho en trecho.
Morcillas blancas:
Para preparar las morcillas blancas agregue a la porción restante, el vino blanco y 3 cucharadas de azúcar. Mézclelo bien y rellene con esta preparación el resto de las tripas. Como el anterior ateles los extremos.
Luego de rellenarlas, coloque todas las tripas dentro del caldo.
Cocínelas por 60 minutos hasta que note que están suaves. Para servirlas, debe sacarlas del caldo y freírlas en poca grasa.
Acompáñelas con trozos pequeños de hígado, corazón y panza. En un plato aparte puede servir el caldo con una tajada de plátano verde cocido.
La pierna de cordero se nota que está cocida cuando al pincharla no...
Las cebolletas le brindan su peculiar sabor a este guisado de carne cerdo.