La silla de cordero, como se ha indicado, es el trozo del lomo entero, desde la parte de la riñonada hasta el rabo.
Al trozo de la carne se le enrolla la parte de la falda y se ata con unas vueltas de bramante, dándole buena forma; se sazona con sal y pimienta y se unta toda ella con mostaza; se coloca en una fuente de horno donde se ha fundido la manteca o su equivalente en aceite; se mete a horno fuerte por espacio de unos tres cuartos de hora. A los veinte o veinticinco minutos se le da la vuelta al trozo de carne y se baña bien con su jugo de vez en cuando, para que no se reseque.
Ya la carne asada se retira del asador, se pone en él el vino y una cucharada de vinagre y dos o tres de agua; se deja hervir unos cinco minutos. Se trincha la carne en filetes y se riega con un poco de la salsa; el resto se presenta en salsera.
Se puede acompañar con patatas fritas partidas en cuadraditos o con ensalada de lechuga. Se sirve.
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